eXTReMe Tracker

viernes, marzo 28, 2008

La novela corta no vende (o casi)

Como ya dije en su día que iba a hacer, hace un par de semanas, envié a la agencia Sandra Bruna un resumen (sinopsis + fragmento) del relato con el que quedé finalista en el premio de relato de yoescribo.com. Pues bien, ayer recibí una respuesta que podríamos calificar como "otra vez casi sí", pero muy positiva a pesar de todo.

El dictamen del departamento de lectura de la agencia ha sido que la idea de mi relato es muy buena, pero que necesita una mayor extensión. Definitivamente, las agencias literarias no trabajan la novela corta, a menos, claro está, que uno sea ya conocido. Recuerdo perfectamente cómo en su día compré "Montado en la bala" de Stephen King por 9 euros, siendo ésta una novela corta no, cortísima. Pero bueno, no es tan negativa la cosa.

El mensaje viene a decir que el pasar de novela corta a novela haría que la historia fuera más fácilmente presentable a editoriales, y lo finalizan animándome a hacerlo y enviársela de nuevo.

No voy a decir que me sorprenda la respuesta. Ya había previsto que algo así pudiera ocurrir, y ampliar esa historia entraba dentro de mis planes desde hace mucho tiempo. Siempre pensé que la presentación de uno de los personajes carecía de cierta información sobre su pasado que explicara sus acciones en el relato, por lo que me resulta interesante convertirlo en novela. Tendré también la ocasión de mejorar algunas escenas que no terminaron de convencerme y añadir alguna que en su día se quedó en el tintero, cuando mi intención era escribir una novela corta. Sólo tengo que procurar no caer en el error de limitarme a meter paja o sucesiones innecesarias de epítetos igualmente innecesarios.

Vamos avanzando,a pequeños pasitos, pero la cosa va. El mes que viene debería recibir respuesta de una editorial respecto de un manuscrito que les envié, concretamente el que Sandra Bruna estuvo a punto de representar, así que actualizaré de nuevo y os pondré al día.

Mientras tanto, saludos a todos y que os vaya bien.

23 comentarios:

Anónimo dijo...

las agencias literarias son unos carroñeros que solo prestan atencion a los textos comerciales. Están degenerando la literatura, convirtiéndola en pura mierda (con perdón, pero es la realidad). No escribas como te impone una agencia, escribe como te apetezca, y luego ya veremos, pero sé tú mismo. Si no, nunca serás nada, más que un títere al servicio de hienas hambrientas.

Troll.

Jorge Urreta dijo...

Amigo Troll, no sé si habrás apreciado en mi artículo que la agencia me ha propuesto algo que ya entraba en mis planes. Creo que hasta tú coincidirás en ver que desaprovechar una oportunidad así sería una estupidez. No seré yo el que rechace a alguien que muestra interés en mí y mi obra.

Y me vas a perdonar, pero carroñeros hay entre los agentes literarios, los editores, los libreros y las aves del cielo.

Fátima Fernández Méndez dijo...

Troll, las agencias buscan textos comerciales porque las editoriales que tratan con ellas es lo que demandan ¿Quién degenera la literatura? ¿Agencias literarias o editoriales?

Fernando Alcalá dijo...

¿Por qué un texto comercial está reñido con la calidad?

Todavía hay cosas que no comprendo.

Lo ideal es que sea ambas cosas, ¿no?

Anónimo dijo...

¿Entonces, digo yo que no entiendo al final quien manda?
Yo creo que el lector, ni las agencias ni las editoriales.
Los lectores leen lo que les apetece ¿no?
O... ¿lo que les imponemos?

Borreguitos de Norit que sois... parece que sois españoles,parece que no tenéis ni idea del mundo editorial, y se nota, vaya si se nota.
Ver a Jorge defendiendo a una agencia es que da una risa que no veas. ¡Si no te ha dado nada, muchacho!
Ya veremos en qué queda esto, ya. Y si no, al tiempo.


Troll, o el que sabe de este mundo y vosotros no.
Que no aprendéis... ¡Coño! No me extraña que se vengan los extranjeros a vender aquí. Si es que...

Jorge Urreta dijo...

Bien, veo que volvemos a disfrutar de los "comentarios" de ciertos elementos anónimos de esos que se dedican a pasar por los blogs y/o foros de los demás, sólo para criticar por criticar y crear polémica. Supongo que para algunos, esos son los únicos momentos en los que dar algo de "chispa" a sus vacías vidas.

Anónimo, aquí el que no conoce en absoluto el mundo editorial eres tú, supuesto lector "erudito" que se cree mejor por leer a los en algunos casos autodenominados "clásicos". Ni el mundo literario son sólo esos clásicos (geniales en su mayoría), ni el mundo literario ha muerto, como muchos de tus amigos anóminos tratan de hacer ver.

A mí sí me da la risa porque a ti te dé al ver que hablo bien de una agencia literaria, aunque no me haya dado nada. Si eres de esos que creen en que te den las cosas "porque yo lo valgo", definitivamente no sabes nada del mundo editorial ni del mundo en general. Nadie me ha dado nada, y no espero que lo haga. Si hablo bien de dicha agencia literaria es porque en ella trabajan personas muy profesionales y competentes, que siempre me han tratado con respeto y una profesionalidad que no he visto en otras personas. Y por supuesto, van de cara en todo momento, no como algunos.

Para terminar esta disertación, un detallito para aquellos a los que se les llena la boca con las palabras "literatura comercial" para criticar a los demás: NADIE (subrayado, en negrita y parpadeante, si os apetece) me ha dictado jamás ninguno de los textos que he escrito, ni cortos ni largos. Si algunos dicen estar hartos de "literatura comercial", yo empiezo a hartarme de puritanos que critican a diestro y siniestro a quienes intentamos hacernos un hueco en el mundo editorial, acusándonos de "vendernos" a lo comercial, sin ni siquiera haber leído nada nuestro.

Anónimo dijo...

¿Dices que no he leído nada tuyo en... Yoescribo? ¿Perdón?

Ves como no sabes ni lo que dices, adulador.

Troll.

Anónimo dijo...

Se me olvidaba.
Nosotros también trabajamos con agencias literarias, pero no contodas. ¿Y sabes por qué?
Adivínalo, anda.

Anónimo dijo...

También se me ha olvidado.
Confundes purista con puritano en ese contexto.
¿Ves por qué tengo razón? ¿Ves por qué hay que ser purista?

Escritor... en espera.

Anónimo dijo...

Y no soy anónimo, soy Troll. Uno que SÍ conoce el mundo editorial, pese a quien pese.

Anónimo dijo...

Y no te valgas de tópicos como eso de la "chispa de la vida".
Dios...

Fátima Fernández Méndez dijo...

Troll, ¿podrías nombrar las agencia literarias a las que desaconsejas acudir?
Pensaba que las agencias literarias no arriesgaban con textos que no fueran comerciales. Reconozco que me ha sorprendido tu entrada.

Fátima Fernández Méndez dijo...

Se me olvidaba, consideré que decías , << las agencias literarias son unos carroñeros que solo prestan atención a los textos comerciales >>, porque eran todas.
Pensaba que las agencias literarias "todas" se dedicaban a buscar la gallina de los huevos de oro.

Jorge Urreta dijo...

Las cosas como son, los anónimos que dedican sus vidas a ir de "salvadores del mundo", dedicándose, como nuestros queridos políticos, al recurso infantil del "y tú más" tienen tanta utilidad como tratar de atrapar la Luna con un lazo (vaya, otro tópico).

Amiguito, cada día tengo más claro que o bien no eres editor en realidad, o bien eres un editor con muy poco trabajo y más tiempo libre, dedicado única y exclusivamente a recorrer los blogs de los demás, mirando por encima del hombro, desde la posición de "yo soy culto, vosotros no". Desde aquí quiero que quede claro que paso de polémicas, que no soy yo el de la pataleta barata y el insulto gratuito. Quien haya dedicado unos minutos a hablar conmigo lo sabe, y son esos (más o menos, el 99,9% de lectores de este blog, adivina quién es el 0,1% restante) los que realmente me valen, los que aportan algo, es decir, opiniones de calidad.

Mânes dijo...

Hola amigo,
Como siempre ¡Ánimo! Si necesitas cualquier cosa: información, alguien con quien hablar del tema,… aquí me tienes.
Es cierto que las editoriales y el mundo literario-editorial en general no se interesan demasiado por cosas cortas, ya sean novelas, relatos, cuentos, libros de cuentos, etc. Pocos te ofrecerán una oportunidad ante algo así, pero a veces te sorprenden. Como ya sabes yo estoy por publicar mi primer libro (dentro de unos días ya lo tendré en mis manos y después tendré que prepararme para la presentación y eso), mi libro es un relato largo, ni siquiera llega a novela corta, y ya ves lo difícil que es introducir algo así en este mundillo esperando que sea editado, pero no me rendí, y a pesar de saberlo seguí adelante.
Así que, si tu piensas que tu novela corta mejorará con unos capítulos más, hazlo, sino, si crees que ya está concluida, no la alargues y aún menos añadas paja para contentar a nadie. Estoy segura de que tendrás tu oportunidad porque eres bueno en lo que haces y disfrutas con ello.
Un beso de una amiga
Isi

Prometeo dijo...

Troll, una cosilla, majete. No tienes ni puta idea de lo que estás hablando.

Anónimo dijo...

¿Tan seguro estás, Prometeo, de qué no sé de lo que hablo?
Cuando quieras nos vemos las caras y hablamos. Igual hasta nos conocemos (o igual no, que también puede ser, este mundo editorial a veces trae sorpresas).
O mejor aún, cuando quieras destapamos toda esta mierda (pero toda toda) y que se enteren de una puta vez de qué va esto. ¿Te apetece? ¿Te apetece contar que muchas agencias (algunas con las que YO trabajo) no aceptan textos no comerciales porque simplemente no se van a vender más de 100 ejemplares? Podemos seguir tanto como quieras. Creo que, al final, quien debe aprender es Jorge y los lectores y los aspirantes a escritores.
No creas que porque tienes un blog, Prometeo, y porque escribes libros, eres el que más sabe de la cuestión. Otros, hasta vivimos de ello.
Troll.

Anónimo dijo...

¡Vaya casualidad!
Acabo de leer la última entrada de Maritornes, no tiene desperdicio.
Así da gusto. Al menos, alguien, defiende lo que se ha de defender.
¡Con dos ovarios!
Troll, otra vez.

Por cierto, Prometeo, gracias por lo de majete. Ahí le has dao.

Maritornes dijo...

Aquí la recientemente aludida. Agradezco al amigo troll sus elogios sobre mi última entrada. Siempre complace agradar a los lectores (esto los escritores lo sabrán muy bien). Tenga o no tenga razón en lo que yo afirmo y escribo en mi blog, la cuestión aquí es otra. Probablemente sepa usted mucho del mundo editorial, no lo dudo; pero si es usted editor, como ha parecido sugerir en alguna de sus intervenciones, le aseguro que yo sé más que usted. Porque resulta que yo trabajo para tipos como usted. Y no sólo conozco sus miserias y sus ínfulas, sino que me río de ellas. Porque cada vez que les paso una facturita, estoy contribuyendo a la inmensa cadena de mierda que todos los editores españoles producen en este país. Las agencias ofrecen lo que ustedes piden, eso a estas alturas nadie por muy memo que sea lo puede ignorar. Entre ustedes se comen y se guisan una literatura estandarizada, vacía y repetitiva que nos proporciona a todos inolvidables momentos en el transporte público. Yo ejecuto sus órdenes y dejo sin corregir erratas, porque a ustedes les sale de los cojones sacar al mercado un libro en determinada fecha, por motivos comerciales, y les importa un pimiento la calidad del libro. Lo quieren para ya. Pues no se hable más: estoy encantada de cobrar por no corregir las erratas para que el libro esté en imprenta a tiempo. Mire qué trabajo más fácil tengo.
Si se precia de editar literatura de calidad, lo primero de lo que tendría que prescindir sería de las agencias. Si vive de ellas, no necesito ver su catálogo; ya me lo imagino. Me parece bien; yo también soy una mercenaria de este santo negocio. Pero no voy de santurrona. Corrijo mierda, lo admito y lo asumo.
Éste es un país lento, cicatero, usurero: no se arriesga. Se sigue el modelo que funciona y que da beneficios, y por eso llevamos 10 años editando el puto Código Da Vinci una y otra vez, aunque lo disfracemos de catedral o de lo que nos dé la gana.
Si de verdad le apetece destapar la mierda, cuente conmigo. Me pondría a hablar sobre los editores españoles y le aseguro que me daría para una trilogía, y no precisamente de literatura fantástica. Pero, ¿de verdad tiene cojones para hacerlo?
Como decía, de todas formas, aquí (es decir, en el blog del señor Jorge Urreta), la cuestión es otra. O mejor dicho, las cuestiones son dos. A saber:
- La soberbia, la falta de educación, las pataletas infantiles del «yo sé más que tú» superan mis niveles de tolerancia al ridículo, y desde luego mi paciencia. Tómese un lexatin, emplee menos tiempo en leer este blog que tanto le obsesiona y dedíquese a repasar las pruebas de sus correctores, por ejemplo, que su negocio se lo agradecerá.
- En segundo lugar, y una vez que hemos establecido que tanto editores como agentes literarios son tremendamente malignos e incompetentes, me atrevo a lanzar por enésima vez la misma puñetera pregunta que nadie me contesta nunca: ¿hasta cuándo los autores noveles van a dejar de culpar al mercado editorial de su fracaso a la hora de publicar? ¿Y cuándo demonios se van a poner a analizar la calidad de su obra, para determinar si efectivamente tienen derecho a saturar las editoriales y los buzones de todo pichipata con sus putas obras? Si lo que os interesa es publicar, sabéis perfectamente el tipo de libro que debéis escribir; sabéis lo que el mercado demanda y lo que consigue amortizar los costes de publicación. Escribid una puta catedral del mar y dejad de quejaros.
Y si lo que os interesa es escribir de verdad, dejad de mandar vuestros originales a editores que sólo tienen tiempo para leer las cinco primeras páginas, con el fin de ver si vuestra historia se ajusta a los estándares del mercado. Contactad con correctores, lectores profesionales o autores con experiencia que os quieran echar un cable.
¿Qué tendrá que ver la literatura con el mundo editorial? Si es que no os enteráis. ¿Verdad, amigo troll? Por cierto, lo mismo nos conocemos. O lo mismo no.
Un abrazo afectuoso a todos.

Anónimo dijo...

Hola, Jorge, Maritornes y demás.
No sé si te habrás dado cuenta que es precisamente por eso que tú comentas (tú, correctora) por lo que llevo aquí dando la lata un tiempecito (aún a riesgo de caer muy mal a la concurrencia), porque los escritores y aspirantes escriban (o pretendan hacerlo) con madurez, originalidad, precisión y talento.
En caso de que yo sea un editor de esos que usted dice, me pasaría por el pepino que la literatura sea una mierda (que en su mayor parte lo es) o que sea algo de mayor calidad.
Me río a carcajadas cuando paso por blogs y foros y veo las medianías que alguna gente se atreve a presentar como el culmen de este u otro género y que, por probar suerte, piensan mandar a editoriales (a mí, algunos textos, me llegan). ¡Por probar suerte!
Las agencias son empresas (ya lo dijo otra persona en otro conocido blog) y han de ofrecer un producto para poder vivir y pagar sus impuestos y a sus trabajadores. Hasta ahí, se puede admitir. Luego están las que, además, buscan otro tipo de textos que para el público en general quedan como inexistentes, escondidos en una capa inferior porque son los buscados por los verdaderos lectores, no esos que van a las grandes librerías y centros comerciales a comprar la cosa más gorda y de más renombre que en esa semana se pueda encontrar, y que van a regalar muy probablemente.
En mi vida, jamás (si algún día llega a conocer donde trabajo podrá certificarlo), he sacado un libro por prisa y lleno de errores ortográficos. ¿Sabe por qué? Porque a mí y a los que trabajan conmigo, o por lo menos a la mayoría, nos gusta leer y nos consideramos Lectores de verdad. Lectores, lectores. Lectores con una cultura bibliográfica que también nos capacita para poder hablar de autores clásicos y poner citas en sus/nuestros blogs como si fuera el descubrimiento universal (lo que usted hizo el otro día en el suyo, que más de uno se quedó boquiabierto por un conocimiento bastante escaso y, probablemente, no sea capaz de nombrar en menos de 15 segundos a los Nobel de Literatura de España). Ser pedante, dárselas de yo sé más, usted también lo hizo (cualquiera puede buscar en Internet textos y colgarlos, pero bueno, esto es otra cuestión).
Por favor, no generalice. Le vengo a decir que, por ello, sigo aquí, cayendo mal al personal, pero persistiendo en una idea, en una creencia.
Este país, señorita, y señores lectores, es un país de mierda, un país de circo gobernado por veinte analfabetos y manipulado por otros tantos medios de comunicación (la mayoria del PSOE) bastante poderosos que nos hacen pensar de cierta manera porque no nos ofrecen información para hacerlo de un modo diferente. Luchar contra eso es algo complicado si uno pretende comer todos los días y pagar para que otros puedan estar meses de huelga mientras cobran tocándose los cojones. Mientras asesinos y ladrones campan a sus anchas por nuestras praderas. Así es este país: una verdadera mierda.
Ahora otra cuestión.
No le permito a usted, señorita, que se atreva a aconsejarme que no lea este blog y los que me apetezca. Me sirve para ver por dónde andan nuestros autores nacionales. A lo mejor, hasta descubro a alguien interesante ¿no cree? Repaso las pruebas de mis correctores cuando creo conveniente y necesario, no se preocupe. Algunos también sabemos leer.
Y la dejo a usted en paz porque sé que en fondo piensa como yo. Sé que está quemada, y se lo agradezco. Disfrute de su fama y siga proporcionando carnaza a sus admiradores. Lo tiene muy fácil. Una planta más arriba todo parece cielo. ¿Me comprende?

Los autores noveles van a seguir culpando al mercado editorial de su fracaso mientras se cumplan dos condiciones bien claras:
1- se consideren en espera, es decir, hibernando mientras miran el mail a ver si alguien se interesa por sus textos.
2- se consideran autores hechos.

Jorge, siento lo que te voy a decir, pero quita de una puñetera vez eso de "Escritor en espera", y pon "Autor que con dos cojones va a ser el próximo Nobel español". Aprende, mejora, pule tu técnica, usa el diccionario, no leas por un tiempo y escribe lo que salga de ti, diferénciate del resto.
Que no, que esto no es así.
Queréis sacar un libro, vender un millón de ejemplares, ser ricos y compraros un chalé en la montaña.

Por ultimo, quien quiera que responda a esta pregunta: ¿qué harían las editoriales si no les llegara ningún texto comercial? ¿Qué publicarían? Es fácil, ¿verdad?
Tenéis en vuestras manos el futuro de la literatura del siglo XXI. Acordaros que tenemos generaciones de autores que pensaban por sí solos, y de quienes, alguien, aún se acuerda. Por favor, no caigan en el error de imitar a los que ya disfrutaron de su grandeza. Sólo serán eso: imitadores.

Troll.

Jorge Urreta dijo...

Empezaré respondiendo a lo que a mí me atañe:

1) Lo de "en espera" me sigue gustando. Es un título que me pareció bueno y no tengo intención de cambiarlo. Si por "espera" entiendes que me siento cada día frente a mis emails y refresco la pantalla cada cinco minutos a ver si llega el de una editorial, acabas de confirmarme que eres, como bien te definí en su día, un "troll" de Internet, uno de esos tipos que pululan por la red y se quedan sólo con lo anecdótico de lo que los demás dicen, buscando la polémica fácil y la descalificación aún más fácil. Me permito recordarte, como ya hice meses atrás, que he finalizado siete novelas, tengo otra en desarrollo, y varios relatos de distintas envergaduras. Y seis de esas siete novelas, más la mayoría de los relatos, los escribí mucho antes de mandar un manuscrito a nadie. No creo que eso sea estar esperando pasivamente.

2) Llevo años escribiendo lo que sale de mí y lo que me da la real gana. No escribo una novela del estilo de las escritas por esos clásicos con los que se te llena la boca, simplemente porque no sale de mí, no porque escriba de cara de tal o cual editorial o de cara a tal o cual estilo. Es la misma razón por la que no escribo novela histórica, no sale de mí, y es un genero que nunca me ha atraido. Si busco vender un millón de ejemplares y escribir siempre comercial, ¿cómo puedo caer en semejante contradicción y no escribir en un género de los "de moda" actualmente?

3)No permito que pongas palabras en mi boca. Nunca he dicho, ni siquiera sugerido, que me considere un autor hecho, y, es más, estoy seguro de que muchos de esos escritores que tanto veneras tampoco se consideraban escritores hechos, pero no por ello eran peores. Con cada historia que escribo, descubro algo nuevo o me arriesgo con una técnica nueva, y sé que puedo aprender muchas cosas. Según tus mismos razonamientos, ahora mismo podría empezar a desvariar y criticarte por la imagen que das, de salvador de la humanidad, y sobre todo, de "hombre hecho y derecho", mientras los demás, o lo que los demás hacemos, leemos, comemos o pensamos es una mierda. Podría imaginarte con tu puro, tu poster firmado por Manuel Fraga o José María Aznar y tu semblante de "último bastión de la cultura española". Y antes de que lo pienses, lo sugieras o incluso lo escribas, no soy ni votante del PSOE ni anarquista, ni comunista, ni ninguna otra tontería que pudieras pensar. Pues, a pesar de todo, ese razonamiento mío y esa descripción no dejaría de ser tan mierda como la tuya, con la misma validez, por buscar exactamente lo mismo que tú: polémica barata.

Aparte de lo antes mencionado, sólo me queda una cosa más que añadir: ¿te has dado cuenta de la publicidad gratuita que me estás dando con tus exabruptos? Últimamente estoy batiendo todos mi records de visitas y he descubierto que me leen correctores, editores, agentes literarios, etc. Y, como bien apuntas, parece que no caes bien a la mayoría. Aunque si te soy del todo sincero, no me importa perder esa publicidad que me haces. Con que los que ya me visitan lo sigan haciendo y descubran algo que les gusta, e incluso se lo cuenten a otros, me doy por satisfecho. Porque mientras todo siga así, tus exabruptos seguirán siendo eso, exabruptos.

Maritornes dijo...

Estimadísimo Troll: es más que evidente que usted y yo estamos de acuerdo en muchísmas cosas. Y yo también leo blogs para estar al tanto de los últimos talentos noveles del mundo internauta (que luego me sirven de carnaza para mi blog, para qué lo voy a negar). Yo pululo por la red y leo muchas cosas, pero sinceramente creo que no vale la pena detenerse demasiado en algunas, ¿me sigue? La mediocridad abunda, y yo no suelo dedicarle demasiado tiempo a algunas cosas.
Por otra parte, ¿por qué da por supuesto que yo copio y pego de internet? Resulta que a Hesíodo me lo leí en el metro, y lo planté en el blog porque soy así de petarda y de pedante.
Piense y crea lo que quiera. Pero emplee un tono acorde a su edad y experiencia. No me joda.

Anónimo dijo...

Hola a todos.
Maritornes, te respondo aquí y no en tu blog porque a Jorge, aunque no lo conozco, ya le voy cogiendo cierto cariño (él, a mí, seguro que no), y no me sabe mal hacerle publicidad gratuita. Igual es lo que necesita para que alguien lo tome en consideración. En esto, a veces, la filantropía prevalece sobre lo demás. No entiendo por qué afirmas que eres una petarda pedante por poner en tu "casa" a Hesíodo. Quien antes no lo conocía, ahora, de leer todo esto, ya sabe que, al menos, existe. Grano a grano.
No afirmo que puedas buscar en Internet lo que creas oportuno i que lo pegues, simplemente que se puede hacer y con ello puede dar la impresión de que lo leías antes de hacer la comunión. Una cuestión de apreciación sin más importancia.
El tono que utilizo, bien sea acorde a mi edad o más infantil, viene por lo expuesto en los post. El cabreo es apreciable. La necesidad, también. La necesidad relacionada con esa cierta nostalgia que será propia de una edad y que, de ver a los valientes escritores que España parió generaciones atrás, ahora, no sé por qué motivo, parece haber desaparecido. Creo que es cuestión de esta generacion tan bien alimentada entre otras cuestiones que no vienen a colación, nada más.
Me hizo gracia, Jorge, que me imaginaras con puro y con la foto de Aznar pegada a la pared. Te he dejado una pista por este texto con la cual, supongo, tendrás para un artículo en el País y para, al menos, adivinar que, por las tierras donde vive este que escribe, ese señor no es nada apreciado.
Dicho lo cual, hasta otra.
Suerte y talento.